Con expectativas como la generada por Person of Interest, ver la tele cada vez se parece más a ir al cine. A la espera de los presuntos taquillazos televisivos de Terra Nova y Alcatraz, el proyecto de J. J. Abrams es el primer blockbuster catódico en asomarse a la nueva temporada. Y con semejante respaldo, la CBS ha tirado la casa por la ventana… Como para ganar premios y ponerse a la altura de las privadas ya tiene The Good Wife, la network se ha rascado el bolsillo y, por lo que parece, tiene confianza en recoger la pasta que ha sembrado para la ocasión; Person of Interest se enfrentará a huesos como Bones, The Office o Anatomía de Grey en el prime time de los jueves a partir de hoy. Y la verdad es que no se sabe muy bien por dónde va a salir el invento… Con Minority Report, Flashforward y un poco de Rubicon como ingredientes televisivos básicos, Person of Interest es una bomba de relojería.
Lo cierto es que con Jonathan Nolan (El Caballero Oscuro) al guión y Michael Emerson (Perdidos) y Jim Caviezel (La pasión de Cristo) delante de las cámaras, la CBS tiene la mitad del camino hecho en cuanto a audiencia se refiere. Conscientes de la ventaja, el piloto de Person of Interest se olvida de contexto y personajes y se mete en harina desde el primer minuto; John Reese, militar retirado y de incógnito, es contratado por Finch, antiguo empleado del gobierno, para salvar a posibles víctimas de asesinato a partir de su número de la seguridad social. Desde este punto la serie prioriza la acción, deja a los protagonistas para después (la historia oculta tras Finch es interesante, pero Reese resulta ciertamente plano) y se reserva estrategias poco sutiles por si en un futuro le interesa retomar líneas de continuidad (los flashbacks sobre la mujer de Reese, ñoños y manidos). Y es que si hacemos caso del primer capítulo, Person of Interest es un procedimental de intriga muy episódico, sencillo y entretenido por el momento. Ni más ni menos.
Lo cierto es que con Jonathan Nolan (El Caballero Oscuro) al guión y Michael Emerson (Perdidos) y Jim Caviezel (La pasión de Cristo) delante de las cámaras, la CBS tiene la mitad del camino hecho en cuanto a audiencia se refiere. Conscientes de la ventaja, el piloto de Person of Interest se olvida de contexto y personajes y se mete en harina desde el primer minuto; John Reese, militar retirado y de incógnito, es contratado por Finch, antiguo empleado del gobierno, para salvar a posibles víctimas de asesinato a partir de su número de la seguridad social. Desde este punto la serie prioriza la acción, deja a los protagonistas para después (la historia oculta tras Finch es interesante, pero Reese resulta ciertamente plano) y se reserva estrategias poco sutiles por si en un futuro le interesa retomar líneas de continuidad (los flashbacks sobre la mujer de Reese, ñoños y manidos). Y es que si hacemos caso del primer capítulo, Person of Interest es un procedimental de intriga muy episódico, sencillo y entretenido por el momento. Ni más ni menos.
Lo curioso es que, aunque probablemente ni lo sepa, Person of Interest es un ejemplar paradigmático respecto a la ficción post 11-S. Podemos decir que Los Soprano, El ala oeste de la Casa Blanca o Battlestar Galactica (y si nos ponemos pejigueros, todas las series norteamericanas) son parte del discurso político-social sobre la era del terror en Estados Unidos, pero es cierto que la nueva serie de la CBS no puede negar pertenecer al género particular nacido directamente de los atentados. Al igual que el cine vivió la regresión a ciertas temáticas sobre la conspiración global y la paranoia preventiva (la misma Minority Report, la trilogía Bourne, etc.), productos televisivos como Flashforward, Rubicon o Person of Interest (estas dos últimas con la presencia constante del skyline indefenso del Manhattan económico) profundizan en el miedo colectivo y las estrategias abusivas de defensa. ¿Parece que no hay mucho más que rascar en Person of Interest? Pues acordaos de Fringe.
Hola!! Gran post, como siempre. Pues tiene pintaza esta de "Person of Interest", aunque... ¿resultará aburrida?
ResponderEliminarLa verdad es que el reparto ayuda: Michael-Linus-Emerson es la bomba y Caviezel... esperemos que esté menos intenso que en sus películas jajaja
Hola Nat!! Pues la verdad es que el piloto ha sido modesto, pero si le damos un tiempo a lo mejor evoluciona y tiene algo que contar. La verdad es que la CBS lo ha dado todo, porque el equipo de producción es de prestigio... Y Emerson es el principal atractivo de la serie (a mí Caviezel me da perecita jeje).
ResponderEliminarMuchas gracias por el comment!!
No sé, no sé, si estas serie es lo mío, aunque sea una buena producción en la que incluso está detrás Jonathan Nola. Con Fringe estuve ahí al final pq la temática me llamaba mucho xD
ResponderEliminarJaina, yo también lo he pensado; yo no soy muy de procedimental, y además parece que tampoco va a aportar mucho, pero cuando hablo de estas cosas siempre me acuerdo de Fringe (aunque el piloto de Person of Interest es más mediocre). La seguiré viendo unos capítulos más a ver qué se cuenta.
ResponderEliminarMuchas gracias por el comment!
Yo no soy naaada de procedimental, y ya veo dos a la semana y me saturo. Además este prota no me va naaada, y la grandeza del otro no la percibí en Lost, porque cuando dejé de ver la serie él aún no era Ben. O como se llamase...
ResponderEliminarEl post me hace dudar, eso sí :)
Ainho, a mí me pasa igual. Los procedimentales me dan pereza, me suelen gustar menos que las que van de continuidad, y reconozco que es un prejuicio. Por eso quiero darle una oportunidad a Person Of Interest; Caviezel es un perezón, pero Emerson lo hace muy bien. A ver si merecen que sigamos con ella aunque sea un capítulo más :D
ResponderEliminarGracias por el comment!!