miércoles, 8 de junio de 2011

Razones por las que se me atraganta Love Bites

Love Bites ha comenzado con muy mal pie... Y no me refiero al estreno, ni tampoco al momento en que a alguien se le ocurrió la idea de producirla (soy tan dañino, pero no tanto)... Lo cierto es que la nueva comedia de la NBC ha tardado más de un año en llegar a las pantallas, desde las upfronts del año pasado. Debido al embarazo de Becki Newton y el abandono de la actriz Jordana Spiro, ambas protagonistas de la serie, y a la apretada agenda personal de la productora Cindy Chupack (Sexo en Nueva York), la llegada a pantallas no se ha producido hasta el pasado 2 de junio, con unas cifras de audiencia bastante decepcionantes… Y es que parece que nadie da un duro por Love Bites. Y con razón(es)…

1. Mis tweets sobre el piloto de la serie

Love Bites 01x01 Dios, y todavía quedan tres cuartos de hora por delante...
Love Bites 01x01 En serio, ¿todavía quedan 35 minutos para que acabe?
Love Bites 01x01 ¿Hola? ¿Quedan 25 minutos?
Love Bites 01x01 Guay, ya sólo quedan 10 minutos...
2. Becki Newton y compañía

Love Bites es sinceramente encomiable en su intento de refrescar los estereotipos de la comedia romántica, no sólo televisiva, sino también en ciertas referencias televisivas muy positivas…. Pero no lo consigue. El primer obstáculo: los personajes protagonistas. Becki Newton (Betty), principal atractivo promocional de la serie, pretende ser tierna y afable, pero no cuaja en su papel ni de lejos, y su amiga es directamente insoportable. Lo mejor: Greg Grunberg, que se nos presenta como un gañán pero acaba resultando muy simpático. Lo más mejor: Jennifer Love Hewitt en su cameo… que yo también tengo mis momentos teen, ¿vale?

3. El rollo babel-amoroso

Uno de los elementos originales de la serie es la combinación de diferentes relatos de amor. Esta estrategia de Love Bites, muy de moda en el cine de hace unos años, parece querer transgredir la estructura de la comedia a través del relato global o “generacional”. Pero nada más lejos de la realidad; además de que las tres historias están cargadas de clichés poco realistas acerca de las relaciones sentimentales y el sexo, es el espectador el que debe decir si una serie es representativa de algo, no el productor o guionista.
4. Música pop y cámara lenta 

Como es de esperar, Love Bites recurre a la planificación audiovisual empleada por el 90% de las series del target. Parece claro que la serie quiere innovar poco en este aspecto: desde el montaje rápido e irónico para aligerar el tono y otorgarle comicidad hasta las composiciones pop y slow motion en escenas especialmente intensas…, como besos y eso… Yo ya lo he visto muchas veces en Gossip Girl, y es la única disfrutable y simpática en tal bizarrismo. Teniendo a Black Lively, ¿para qué voy a ver a Becki?

5. Refranero popular televisivo

Es muy desesperanzador que a estas alturas del juego catódico los guiones televisivos rebosen tópicos mil veces criticados y que han llevado a la ruina a otras series. Situaciones un tanto absurdas y nada graciosas como la de la chica que se inventa que es virgen para ligar en una discoteca o la del novio que se informa sobre vibradores para satisfacer a su chica... Puede que Love Bites esté dirigida a un público adolescente-juvenil, pero… ¿de verdad pensáis que queremos más de lo mismo?

2 comentarios:

  1. Creo que otro de tus issues con la serie es tu avanzada (o escasa) edad...

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  2. Tú sí que metes el dedo en el ojo, y no los de Psychoville jiji

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